Nueva York - Saba:
La Oficina de las Naciones Unidas para la Coordinación de Asuntos Humanitarios (OCHA) advirtió sobre la continuación de los ataques israelíes dirigidos directamente contra tiendas de campaña y escuelas que albergan a personas desplazadas en la Franja de Gaza, así como contra civiles que intentan acceder a ayuda alimentaria, lo que ha causado un gran número de víctimas.
En su nuevo informe publicado el viernes, la oficina declaró que más de 714.000 personas (un tercio de la población de Gaza) han sido desplazadas en los últimos tres meses, en medio de una escalada de la agresión y el agravamiento de la crisis humanitaria.
El informe también indicó que el combustible se está agotando en la Franja, lo que amenaza con interrumpir servicios vitales, como las unidades de cuidados intensivos y la producción de agua, y advirtió sobre las consecuencias catastróficas para los pacientes y los centros de salud.
El informe indicó que la falta de combustible obligó a los trabajadores de protección infantil a desplazarse a pie, lo que retrasó la respuesta a casos urgentes y aumentó los riesgos para los niños no acompañados y separados de sus familias.
En Cisjordania, la Oficina informó que los colonos lanzaron aproximadamente 740 ataques contra más de 200 comunidades palestinas durante el primer semestre de 2025, hiriendo a 340 palestinos y causando cuantiosos daños materiales.
En junio pasado se registró el mayor número de heridos en dos décadas, con 95 heridos a manos de colonos, un promedio de tres heridos al día.
La Oficina también documentó la demolición masiva por parte de la ocupación de la comunidad pastoral de Tal al-Khashaba en el valle del Jordán, que provocó el desplazamiento de cinco familias palestinas.
Señaló que esta es la tercera demolición masiva en la comunidad desde principios de año, mientras que el ejército israelí ha emitido órdenes de demolición para 104 estructuras en el campo de refugiados de Tulkarem.
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