Sanaá - Saba:
El Gobierno de la República de Yemen en Sanaá condenó enérgicamente la flagrante agresión sionista contra la República Islámica de Irán, que tuvo como blanco la capital, Teherán, y varias provincias.
En un comunicado emitido hoy, el Gobierno de Cambio y Construcción consideró la ilegítima e injustificada agresión sionista contra Irán como un nuevo episodio de la serie de arrogancia sionista en la región, respaldada por la clara participación estadounidense mediante armamento avanzado, apoyo logístico, incitación y cobertura política y mediática.
El comunicado indicó que esta agresión se produjo tras una escalada sistemática de Occidente contra la República Islámica de Irán, frente al llamado Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA), que se ha convertido en una herramienta dócil en manos de la entidad sionista y sus partidarios, aplicando un doble rasero y haciendo la vista gorda ante el arsenal nuclear de Israel, que amenaza la seguridad regional, mientras persigue un programa pacífico en el que Irán se adhiere a las normas y usos legítimos.
El comunicado decía: «No es ninguna novedad que las fuerzas del mal inventen falsos pretextos para justificar su agresión. Así como Estados Unidos invadió Irak ayer con el pretexto de armas de destrucción masiva, el enemigo israelí repite hoy la misma situación con Irán, utilizando la misma narrativa sobre la falta de pacificación de su programa nuclear». El gobierno de la República de Yemen en Sanaá afirmó que las injustas sanciones y la brutal agresión contra Irán no son más que un intento desesperado de Estados Unidos e Israel, en el marco de la política de máxima presión, cuyo objetivo es frenar el apoyo firme y basado en principios de Irán al pueblo palestino y dejar a Gaza sola frente a la maquinaria de exterminio y el genocidio perpetrados por la entidad sionista.
La declaración señaló que el Gobierno de Cambio y Reconstrucción confía plenamente en que el apoyo iraní al pueblo palestino no cesará y que la llama del apoyo a la resistencia no se extinguirá bajo ninguna presión, amenaza, sacrificio o pérdida. Enfatizó que «la República Islámica de Irán, tal como la conocemos, seguirá apoyando y ayudando a todos los oprimidos y seguirá trabajando para detener el crimen del siglo perpetrado por los sionistas y estadounidenses en Gaza y Palestina». Si bien el gobierno expresó sus más profundas condolencias y sincera solidaridad con el pueblo, los líderes y el gobierno de la República Islámica de Irán por todos los mártires que murieron durante la agresión sionista contra el país, afirmó su confianza en que Irán es capaz de responder a esta agresión y a cualquier violación de su soberanía y los derechos de su pueblo.
La declaración añadió: «Irán, que se ha enfrentado a las fuerzas más poderosas y ha resistido asedios y amenazas durante décadas, es hoy capaz de disuadir a los agresores y enseñarles lecciones que jamás olvidarán».
El Gobierno de Cambio y Reconstrucción responsabilizó plenamente a la entidad de ocupación israelí y a sus socios internacionales, en primer lugar a los Estados Unidos de América, de todas las graves repercusiones y consecuencias de esta agresión a nivel regional e internacional, subrayando que avivar el fuego en la región solo quemará los dedos de quienes lo provocaron, y que la arrogancia del poder inevitablemente se hará añicos contra la roca de la verdad y la firmeza.
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