Gaza-Saba:

El Comité Internacional de Apoyo a los Derechos del Pueblo Palestino condenó en los términos más enérgicos la atroz masacre perpetrada por las fuerzas enemigas sionistas, que abrieron fuego contra civiles hambrientos reunidos frente a un punto de distribución de ayuda estadounidense-israelí al oeste de Rafah. La masacre ha causado hasta ahora la muerte de 30 civiles y heridos a más de 150.

La Organización Internacional para las Migraciones (OIM) dijo en una declaración recibida por la agencia de noticias yemení Saba el domingo que en otro crimen, fuerzas enemigas abrieron fuego contra civiles reunidos cerca de un punto de distribución de ayuda estadounidense-israelí en el centro de la Franja de Gaza en el eje Netzarim, matando a un civil e hiriendo a docenas.

El Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR) añadió que las fuerzas enemigas han convertido los puntos de distribución de ayuda estadounidense-israelí en zonas de matanza, caos, humillación y degradación de la dignidad humana, ya que se han repetido incidentes de asesinatos y ataques contra civiles hambrientos, lo que eleva el número de muertos desde el inicio de la implementación del mecanismo de distribución de ayuda estadounidense-israelí el 27 de mayo de 2025 a 49 mártires y casi 250 heridos, además de decenas de ciudadanos desaparecidos. Esto convierte al mecanismo estadounidense-israelí en una de las herramientas del genocidio y la matanza en masa y en el uso criminal del arma del hambre y de la ayuda humanitaria contra los residentes de la Franja de Gaza, además de que este mecanismo viola completamente los principios y estándares del trabajo humanitario y las normas del derecho internacional humanitario.

El Comité Internacional "Hashd" renovó su llamado a la comunidad internacional, a las Naciones Unidas y a los Estados Partes en las Convenciones de Ginebra y en la Convención para la Prevención y la Sanción del Delito de Genocidio para que asuman su responsabilidad moral y jurídica de detener el crimen de genocidio y abolir el fallido mecanismo estadounidense-israelí que pretende legitimar los crímenes de hambre y la exclusión de las organizaciones humanitarias internacionales. También pidió que se obligara al enemigo israelí a reanudar el flujo de ayuda humanitaria y de socorro y de suministros médicos sin restricciones, a través de las Naciones Unidas y sus organismos especializados, especialmente el Organismo de Obras Públicas y Socorro de las Naciones Unidas para los Refugiados de Palestina en el Cercano Oriente (OOPS) y otras organizaciones humanitarias. También pidió que se trabaje seriamente para brindar protección internacional a los civiles palestinos, activar mecanismos de boicot, imponer sanciones al enemigo israelí y exigir cuentas ante tribunales internacionales a sus dirigentes y socios en el crimen de genocidio.