
Ginebra - Saba:
Los dos bancos internacionales, UBS y Goldman Sachs, se han negado a abrir cuentas bancarias para la denominada Fundación Humanitaria de Gaza, una entidad apoyada por Estados Unidos y vinculada a los ataques mortales contra cientos de palestinos que intentaban obtener ayuda en la asediada Franja de Gaza.
Reuters reveló hoy viernes, citando a dos fuentes bien informadas, que las dos instituciones financieras se negaron a negociar con la entidad debido a la falta de transparencia sobre sus fuentes de financiación, además de la presión política que acompañó los intentos fallidos de abrir cuentas en Suiza.
Una de las fuentes afirmó que las conversaciones de la fundación con UBS y Goldman Sachs se enfrentaron a obstáculos significativos, en particular la ambigüedad financiera y la falta de documentación suficiente, lo que llevó a ambos bancos a negarse a cooperar a pesar de la presión directa estadounidense e israelí. La fundación intentó establecer una sucursal en Ginebra, Suiza, pero sus esfuerzos fracasaron debido a un déficit financiero y la falta de donaciones. Esto se agravó con la renuncia del director ejecutivo, Jake Wood, en mayo pasado, y la salida de varios miembros fundadores, lo que complicó aún más los intentos de integración en el sistema financiero europeo.
La Fundación Humanitaria de Gaza se describe como un proyecto político conjunto entre Estados Unidos y la entidad ocupante, cuyo objetivo es reforzar el control sobre la ayuda humanitaria en Gaza, eludiendo a las instituciones internacionales y locales.
La fundación ha recibido críticas de organizaciones internacionales y humanitarias, que la acusan de utilizar la ayuda como arma de chantaje político y limpieza indirecta.
En este contexto, UNRWA confirmó que los puntos de distribución de la fundación se han convertido en trampas mortales para los palestinos, dados los repetidos ataques del ejército israelí.
En su último informe de la ONU, el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos afirmó que al menos 613 palestinos murieron en los alrededores de los puntos de distribución de ayuda de la organización, incluyendo al menos 509 muertos en puntos de distribución gestionados directamente por la organización.
La portavoz de la oficina, Ravina Shamdasani, afirmó que estas cifras se documentaron hasta el 27 de junio, señalando que hubo incidentes adicionales que aún no se habían documentado en su totalidad.
Explicó que los datos se basaban en diversas fuentes, como hospitales, cementerios y familias palestinas, así como organizaciones locales y socios internacionales.
Desde el inicio de sus operaciones a finales de mayo, la organización ha liderado la distribución de alimentos y medicamentos en zonas de la Franja de Gaza. Sin embargo, las concentraciones en torno a estos puntos se han convertido en sangrientas emboscadas debido a los bombardeos y disparos directos del ejército enemigo, una terrible repetición sin ninguna rendición de cuentas internacional.