
Teherán-Saba:
El presidente del Parlamento iraní, Mohammad Baqer Qalibaf, afirmó que el irrespetuoso presidente estadounidense está reimponiendo sanciones no levantadas en su ciberespacio virtual, afirmando que las posturas del presidente estadounidense, que se aprovechan de él, forman parte de un plan psicológico práctico para infundir miedo en la población y confundir la rendición de cuentas de los funcionarios.
Qalibaf declaró, según la agencia de noticias iraní ISNA: «Los enemigos de Irán han sufrido una aplastante e histórica derrota a manos del pueblo iraní», y añadió: «El pueblo iraní ha defraudado las esperanzas de quienes albergan mala voluntad hacia este país y su territorio, y ha provocado la ira de los traidores». Qalibaf añadió: «Ahora que la entusiasta juventud iraní ha decepcionado a los enemigos de Irán de esta manera, los detractores intentan romper la unidad de los iraníes frente al enemigo mediante operaciones psicológicas, enviando mensajes contradictorios y sin sentido, desestabilizando el sistema contable público y completando sus asuntos pendientes sembrando el caos en Irán».
Qalibaf afirmó: «El envío de mensajes contradictorios, la infundada alarma entre la población y la difusión de noticias falsas por parte de los políticos se han convertido en uno de los principales elementos de las operaciones psicológicas del enemigo. Examinar las posturas del irrespetuoso presidente estadounidense es una clara prueba de ello. Un día, levanta las sanciones en su espacio virtual para engañar al público sin emitir una orden ejecutiva, y horas después, impone sanciones que aún no se han levantado, con el pretexto de una postura específica de los funcionarios iraníes, para sugerir que las sanciones son la causa de las sanciones». Continuó: «La pregunta de cómo Estados Unidos inició una guerra en medio de negociaciones aún no tiene respuesta, y su presidente anuncia su sueño de un acuerdo impuesto como noticia para presentarse ante el pueblo iraní como un amante de la paz. Poco después, menciona la posibilidad de reiniciar una guerra para infundir miedo en el valiente pueblo iraní».
Qalibaf enfatizó que este presidente estadounidense, tan apostador, carece de credibilidad. Cada comentario que hace forma parte de una operación psicológica para infundir desesperación y miedo en el pueblo iraní y perturbar el sistema contable de los funcionarios del país, o es un comentario ridículo y sin sentido destinado a llamar la atención.
Continuó: «Los iraníes no abandonarán su patria bajo ninguna circunstancia, y no hay mejor lugar para mercenarios y traidores junto a los enemigos de esta tierra que las cloacas de la historia y el basurero de la memoria colectiva de Irán».