
Nueva York - Saba:
El Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF) dijo anoche que el 60% de las instalaciones de producción de agua potable de la Franja de Gaza están fuera de servicio, exponiendo a los residentes al riesgo de una sequía provocada políticamente.
"Los niños empezarán a morir de sed y estamos lejos de cumplir los estándares de emergencia en materia de agua potable", dijo el portavoz de UNICEF, James Ealde.
"La sequía provocada por el hombre se puede detener si se proporciona combustible", continuó.
Eld señaló que la escasez de combustible provocada por el bloqueo ha provocado la interrupción de las estaciones de desalinización y de bombeo y, en consecuencia, el colapso del suministro de agua.
El enemigo continúa con su política de “hambruna sistemática”, cerrando los cruces y evitando el flujo de ayuda, en medio de la incapacidad de la comunidad internacional para detener el creciente colapso humanitario dentro de Gaza.